Los limites de PENSAR POSITIVO

Me gusta mucho aprovechar las Redes Sociales para enviar mensajes positivos considerando que “Nuestra actitud ante la vida diaria… logrará transformar nuestros pensamientos negativos en positivos..."  partiendo del supuesto que todas nuestras acciones del día con día se verán favorecidas con esta apertura de la mente.

Este tipo de mensajes abundan tanto en Facebook como en Twitter,  y desde mi personal punto de vista, si se logra un efecto importante en un gran número de personas que los leen, ya que logran modificar su actitud por lo menos a corto plazo. 

Estoy conciente que cuando se trata de circunstancias mas especiales y/o difíciles, estos mensajes son únicamente un destello de esperanza.

Todas las teorías que de algún modo se relacionan con “El Poder de lo PLACEBO y lo NOCEBO” han cobrado muchísima fuerza especialmente en la cultura occidental tratando de tener una vida mas cerca del estado espiritual llamado FELICIDAD; lo que en las tradiciones orientales  han considerado por siglos.

Sin embargo, en el mundo que considera la FELICIDAD como un artículo "Egoísta" cuando de forma común se proclamar “Una vida sacrificada…” llegando a tal grado de  recomendar que se cargue una cruz para toda su vida.

Es en estas culturas donde hay una real necesidad de cambiar actitudes mediante las cuales se considera importante que sea la misma persona quien promueva esos cambios; quitando un poco de la responsabilidad a Dios. Es simplemente ofrecer una opción diferente en la que la propia mente tiene la opción de incluso lograr la  curación, la eficacia y realidad del efecto PLACEBO es indiscutible.  

Pero es importante recordar que la mente funciona igualmente en dirección opuesta, y en casos extremos puede incluso provocar la propia muerte. A esto último se llama efecto NOCEBO.

Regresando a la promoción de la esta actitud diferente para afrontar la vida, es de suma urgencia analizar el lado contrario, o más bien  su lado “Extremo” que efectivamente existe en  esta tendencia tan de moda.

Un reciente editorial en el New York Time destaca la forma en que todas esas corrientes que se refiere a “Gurús de la AUTOESTIMA”  y en general autores de libros de autoayuda tienen un lado oscuro, y que las   expectativas de estas creencias han mostrado también importantes desventajas.

Un ejemplo de los casos extremos a donde son llevadas esas creencias, es lo ocurrido este verano en donde 21 personas participantes en un acto de un predicador motivacional en el estado norteamericano de California, y quienes sufrieron graves quemaduras después de caminar sobre brasas ardiendo. El problema no fue que hayan vacilado en sus creencias de que era posible resistir el calor, el problema es que aún con sus creencias, el fuego hizo lo propio sobre sus pies.

¿Es suficiente un efusivo POSITIVISMO o será mejor replantear nuestra relación con las EMOCIONES?

En casos de enfermedades las investigaciones muestran que los pacientes son más susceptibles al poder de la sugestión. El hecho de que los PLACEBOS puedan tener un efecto positivo sobre los pacientes es un fenómeno ampliamente reportado. El enfermo mejora porque espera hacerlo y sus creencia propician que así suceda; pero igualmente este efecto puede ser contrario.

Una vez que el paciente advierte que  el tratamiento que sigue (díganse pastillas u otro tipo de remedios), tienen algún efecto negativo, serán mayores y más  altas las posibilidades de sufrir esos efectos, aún y que las pastillas tomadas no sean genuinas; es en estos casos en donde se advierte un efecto “NOCEBO”.   

Se reportan casos muy específicos, como el sufrido por una mujer norteamericana quien encontró que una disciplina denominada “Bikram Yoga” mediante la cual se debe practicar estos ejercicios en una habitación previamente calentada a 37 grados C, ya que esto es de gran ayuda en casos de ansiedad e insomnio. Al inicio de esta práctica ella manifestó  disfrutar una “Enorme felicidad” una vez que dio inicio a sus primeras sesiones. Sin embargo, su estado de euforia no estaba destinado a ser permanente aún y que ella cumplió religiosamente su plan de hacer 365 sesiones en 365 días, pues finalmente su euforia disminuyó y dejó de hacer efecto ese llamado Bikram Yoga. Ella se vio obligada a reanudar su tratamiento de consumir somníferos cada noche.

Otro estudio en el que participaron personas con y sin intolerantes a los lácteos y que realizaron expertos gastroenterólogos italianos, pidió a los participantes que consumieran lactosa. Sin que ellos se enteraran, se les proporcionó glucosa en lugar de la lactosa. El resultado fue que el 44% de estos participantes  con intolerancia y 26 % de los tolerantes, reportaron problemas estomacales.

Con estos hechos demostramos de forma definitiva que el poder de la mente es real, pero que igual se puede llegar a extremos,  si no se logra controlar las emociones,  y se le deja todo el esfuerzo  a la mente y no se trabaja sobre las EMOCIONES.

Por mi parte yo seguiré tratando de motivar a las personas para que en cualquier situación asuman una actitud positiva, pero también dejaré claro que como todo en esta vida: “Ante cualquier situación, lo más importante es guardar un equilibrio emocionalmente razonable….”

No podemos dejar de enfatizar que en situaciones extremas la ciencia ofrece mejores alternativas, y la BUENA ACTITUD y la FE  ayudan  para un buen comienzo de cualquier tratamiento o transformación.